Don José Luis Villablanca Troncoso llegó de Pinto el año 1900 a trabajar con un Francés avencindado en Chillán de nombre Francisco Chessnel casado con la señora Gumercinda Troncoso, a una “fábrica” de cecinas muy artesanal donde los principales productos que se elaboraban eran chorizos, arrollados, quesos de cabeza, chuletas y costillares, esta fábrica estaba ubicada en calle Yerbas Buenas al llegar Cocharcas, posteriormente se trasladó a avenida Collín Nº916. A la muerte de Don Francisco el año 1930 Don José Luis siguió trabajando en la fábrica hasta el año 1934, al año siguiente en 1935 se independizó, su inicio fue en Avenida Collín Nº976, con un espacio de 200 mt2, que ocupaba la casa habitación y fábrica y con un puesto de venta en el portal del mercado municipal.
Su forma de trabajo era muy artesanal siguiendo la línea de su ex patrón que le enseñó sus primeros pasos en la fabricación de cecinas, fabricaba especialmente longaniza, prietas, arrollado, chorizos y el tradicional paté de cerdo. El espacio y máquinas utilizados eran muy limitados y rudimentarios, pero el sabor que le daba a sus productos eran muy apetecidos, de esta manera fue tomando forma y reconocimiento en la zona.